El pastor valdense Giorgio Bouchard falleció a sus 90 años, en Torre Pellice, Italia, el pasado lunes 27 de julio de 2020.
Giorgio participó activamente en todos los aspectos de la vida de su iglesia, como así también de las iglesias evangélicas en general, ya que fue presidente de la Federación de Iglesias Evangélicas en Italia entre 1988 y 1994. Estudió Literatura en Turin, donde se laureó y Teología que concluye en 1957. Luego, como estudiante hizo la práctica en las iglesias de Prali y de Luserna S. Giovanni durante el período de prueba y después de su consagración en 1958 fue pastor en Biella e Ivrea y posteriormente en Milán. Aquí se ocupó en particular de la diáspora del hinterland donde estuvo a cargo de la experiencia Cinisello-Balsamo. Mientras tanto, asimismo, continuaba a cargo de la iglesia valdense de Brescia.
“Acabamos de recibir la noticia del fallecimiento del pastor Giorgio, cercano ya a los 91 años. El pastor Bouchard era un referente para la Iglesia Valdense de Italia. Además de su periplo como pastor de varias iglesias desde Torino a Nápoles, integró a lo largo de su fructífera vida diversos organismos y comisiones, dirigió publicaciones, escribió libros, y decena de artículos donde mostró también la agudeza de su pluma.
Fue especialmente a través de sus escritos que dialogó, desde el Evangelio, con diversos enfoques de la sociedad pensante europea con sus logros y contradicciones. Su predicación y discurso fueron siempre un desafío para la toma de conciencia y la lucha por un mundo más humano. Su prédica tenía siempre un destacado imperativo para acción y el testimonio. Despertaba voluntades.
Nosotros le recordamos porque cuando visitó nuestras iglesias como moderador (1979-1986), nos desafió a realizar una pasantía en Italia como experiencia pastoral. Así, a comienzos de 1983 llegamos a Milán para participar por un semestre en la ‘comuna’ de Cinisello-Bálsamo en las afueras de la ciudad. Este era un proyecto creado a impulsos del propio Bouchard y (de otros) en los años ‘60 para acompañar la inserción de inmigrantes del sur de Italia en la gran ciudad. El proyecto ofrecía cursos de capacitación para los futuros operarios a fin de estar a la altura de las exigencias de su nuevo ámbito de trabajo. Los integrantes del equipo, de varias profesiones y procedencias, vivíamos en comunidad, compartíamos la cocina, el comedor, las tareas y el presupuesto mensual de a cuerdo a nuestros ingresos. Bouchard ya no estaba en el grupo cuando nosotros llegamos a Milán porque en ese tiempo era Moderador de Tavola Valdese. Pero todo el que nos contaba algo de los comienzos de sus desafíos y compromisos, hablaban de la persona de Giorgio como el alma máter de aquel proyecto.
Seguramente sus libros y sus artículos seguirán desafiando a quienes le conocieron y aún a aquellos que le conocerán leyendo sus páginas. Quienes pudimos conocerle en persona, seguiremos dando gracias al señor por su rico ministerio al servicio del Evangelio de Jesucristo.”
Hugo Gonnet y Lily Artus.
Por otro lado, el compromiso del pastor Bouchard también creció en la administración de la Iglesia: entre 1971 y 1975 fue miembro de la Mesa Valdense (Tavola Valdese), de la cual se convertiría en vice-moderador en 1975 y moderador en 1979. Estos fueron años cruciales en lo que respecta a las relaciones de la Iglesia Valdense (período en el que las iglesias valdenses y metodistas unían sus fuerzas a través del Pacto de Integración de 1975) con el Estado. En febrero de 1984, el moderador Bouchard firmó el Acuerdo entre el Gobierno Italiano y la Mesa Valdense (Tavola Valdese) junto con el Presidente del Consejo.
“Conocí a Giorgio en la Asamblea Sinodal Europea en agosto de 1986. Ese año, Ricardo Ribeiro ocupaba el cargo de Moderador de la Mesa Valdense y no podía asistir al Sínodo en Italia. Fui nombrado entonces para participar. Allí vi a Giorgio en pleno desempeño de su función, cumpliendo el último año del septenio como Moderador de la Tavola Valdese y comprometido profundamente con el vínculo entre ambas áreas. Fuimos atendidos con mucho afecto y dedicación. Varios contactos pudimos generan a partir de indicaciones que había dado a colaboradores/as. Recuerdo que un día durante el Sínodo me dijo: ‘mañana al medio día tenemos reunión con todos/as los/as representantes de Iglesias y Organizaciones que nos apoyan y tenés que estar. Allí pesentá brevemente algunos de los campos de servicio y testimonio. No tenés que pedir Nada…. No es necesario, ellos y ellas luego hablarán contigo y si necesitas alguien que te ayude con el idioma, avísame’. Personalmente manejaba el idioma Italiano así que, él mismo hizo la traducción en ese almuerzo. Puedo decir hoy, que ya teníamos aceitado el vinculo con la Sociedad Valdense Americana, luego de la participación de Frank Gibson en la Asamblea Sinodal de San Gustavo en el año 1985 y con este apoyo de la Tavola, en la persona de Giorgio se profundizaron los vínculos que ya estaban con Comités de Amigos de la Iglesia Valdense de Alemania y Suiza. Muchos de los cuales continúan apoyando a nuestra Iglesia en el Río de La Plata. Giorgio era un pastor comprometido totalmente en diferentes áreas. Conocedor de la realidad de las comunidades de fe, de los temas ecuménicos, de la sociedad en general. Doy gracias a Dios por haber compartido con Giorgio momentos de la historia de Fe de nuestra Iglesia en sus expresiones en Europa y el Río de La Plata.”
Pastor Emérito Hugo Malán
Una vez concluido su rol como moderador (1986) Giorgio Bouchard fue elegido pastor de la iglesia valdense de Nápoles / via dei Cimbri y Caivano, luego las últimas iglesias a las que sirvió fueron las de Turín y Susa. En Turín también fue presidente del Hospital Evangélico (1994-2003).
Finalmente, la historia de sus elecciones y su vocación se cuenta en la extensa serie de libros escritos, muchos de ellos con su esposa Piera Egidi, dado que la actividad en la gestión y administración de la Iglesia no le impidió llevar a cabo una larga labor editorial. Primero en el sector publicitario como secretario de la Federación de Uniones Valdenses, donde fue editor de la revista Gioventù evangelica, y luego con importantes colaboraciones de artículos sobre prensa evangélica en La luce e Riforma.
Damos gracias a Dios por su ministerio y sus dones y oramos para que su Espíritu siga acompañando a su esposa y sus hijos.
Verónica Biech
Secretaría de Comunicaciones IEVRP
Foto de Pietro Romeo
Fuente
Conocimos a Giorgio en Agape donde tuvimos el privilegio de participar en campamentos en 1964 y 65. Fueron días de reflexión, música y amistad fermentales e inolvidables. Sus palabras fueron lámparas para nosotros,
ciertamente.