AMANECE UN NUEVO DÍA

Buen Dios, te damos gracias por el cobijo y tu cuidado, aquí en este lugar en el que nos toca estar hoy y te pedimos que, así como nos has dado dones, que podamos ser creativos para utilizarlos en este tiempo de cuarentena, en el cual necesitamos estar lejos los unos de otros, y de las otras, para cuidar y cuidarnos. Bendícenos con la oportunidad de que aun así podemos ser capaces de ser tus testigos, haciendo lo posible para que tu Reino se manifieste en este mundo.

Bendícenos con vergüenza no para que nos escondamos ante las responsabilidades, sino para que podamos ofrecer nuestro tiempo, nuestros dones, nuestro dinero, nuestros bienes a disposición de tu misión, siendo conscientes de que todo ya lo hemos recibido de tu mano generosa.

Concédenos la consciencia de que aún teniendo que permanecer alejados físicamente de los y las demás, nuestra vida sea ofrecida continuamente por las necesidades del mundo. Ayúdanos a proclamar el Evangelio fielmente, en palabras y en acciones concretas, en las decisiones que tomamos y en el mundo que nos toca actuar.

Enséñanos que buscarte cada día, para que la oración sea un refugio cotidiano, en la que podamos encontrar en ti fortaleza, esperanza y sostén. Que nuestra Iglesia y sus líderes sean siempre fieles a ti. Que como comunidad de creyentes escuchemos tus mandatos, sabiendo proteger la vida, defender la dignidad y buscar la justicia a cada paso que damos.

Bendice y fortalece este tiempo difícil de pandemia. Sostén a nuestro Presidente, al Ministro de Salud y a todos los funcionarios y las funcionarias que deben tomar decisiones en este momento, para que lo hagan con coraje, pero siendo conscientes y precavidos. Fortalece y protege a médicos, médicas, enfermeros y enfermeras, trabajadores y trabajadoras de la salud, que hoy están muy expuestos, pero sin embargo están firmes en sus puestos de trabajo dando testimonio de amor, cuidado y solidaridad. Así también te pedido que cuides y protejas a todas las personas que velan por nuestra seguridad en este tiempo de incertidumbre.

Permite que en este tiempo de incertidumbre la luz de un nuevo día comience a amanecer, para que otra vez podamos encontrar en la fuerza de la comunión la esperanza para continuar, la creatividad para proclamar tu palabra y seguir viviendo bajo la esperanza de tu cruz.

Amén

Pastor Eugenio Albrecht