Leemos en nuestra Biblia: Mateo 9:35 al 10:8
Jesús andaba a “Full”, recorría los pueblos enseñando, curando de dolencias y predicando el evangelio del reino.
¿De qué se trataba esto de anunciar buenas noticias sobre el Reino?¿Acaso se trataba de enseñar y organizar al pueblo sometido, indefenso y vulnerable para que se revele ante tanta opresión de las autoridades, logrando así mejores condiciones de vida?
¿O era “anunciar que Dios se había acercado y estaba a la puerta llamando” a cada persona, sea griego o esclavo, sea religioso o político, sea hombre o mujer, para traer paz y esperanza?
El resultado final pareciera ser casi el mismo, “que cada persona tenga una vida más placentera, con menos pesares y más libertades”; pero la gran diferencia radica que en el primer punto el cambio lo tienen que realizar “los demás” (EL ENTORNO), y en el segundo punto el cambio primero es mío (INTERNO). YO tengo LA LLAVE, YO decido abrirle la puerta al ARQUITECTO para que construya desde los cimientos y sobre la roca y que no se trate solo de un cambio pasajero y externo, de un maquillaje que con cualquier inclemencia climática se derrumbará.
… al ver a la gente sintió compasión porque estaban cansados y abatidos… como ovejas sin pastor…
¿Jesús vino a LIBERARNOS, pero se compadece de la gente que anda libre, suelta, sin ataduras externas?
Nuestra sociedad, al igual que en los tiempos de Jesús, está llena de personas que andan como “BOLA SIN MANIJA”, muchas personas que usaron sus libertades para hacer lo que se le plazca, llegando a aislarse, rindiendo culto a TEORÍAS LIBERALES que sólo conducen a la SOLEDAD y muchas veces a vivir resentidos/as del mundo y con el mundo.
La PROPUESTA del REINO que nos trae Jesús es vida en comunidad (majada de ovejas), en donde nos podamos acompañar, apoyar y fortalecer; siguiendo al PASTOR que sabe de nuestras necesidades, de nuestras dolencias, de nuestras LLAGAS, que sabe qué es lo que necesitamos, que pone algunos límites para mantenernos al resguardo de “lobos”, que andan muy cerca nuestro y hasta muchas veces “disfrazados”.
Dios es nuestro Padre (lo repetimos a diario), pero no lo dejamos actuar como tal. Queremos que nos cuide, nos enseñe, nos proteja, nos alimente… pero a la hora de actuar le ponemos “freno”, porque pensamos que está invadiendo nuestras “libertades”.
Pedimos a Dios DE TODO, pero NO estamos dispuestos a ir donde Él nos manda, sólo queremos hacer lo que a nosotros nos parece bien desde nuestra visión muchas veces atrofiada o por lo menos focalizada, FINITA… Más de una vez me ha pasado que realizando un trabajo específico en el medio de un monte los árboles limitaban mi visión, mi labor parecía insignificante y hasta INÚTIL; pero que luego, vista desde una visión más general CON EL PASO DE LOS DÍAS O DESDE UN DRON, mi tarea era espectacular y absolutamente necesaria para el desarrollo y mejoras del “todo”. Desde ahí he podido entender más claramente que la visión de Dios es mucho más amplia que la mía, por lo tanto muchas veces solo tengo que CAMINAR EN FE, hasta que Él pueda enseñarme el resultado COMPLETO, de lo que estábamos realizando.
Quiera Dios nos de las agallas y la Fe necesaria, para ponernos en sus manos y dejarnos conducir para tener una vida mas plena y que podamos ser sus INSTRUMENTOS en el día a día.
… la Esperanza no ansia no es ganas, no se compra por mas cola que tu hagas … la esperanza como el sol de la mañana, va quebrando la neblina que nos PARA… La esperanza es indefensa, va sin armas y libre anda. En Jesús esta su fuerza, en sus pasos, sus palabras… (cancionero abierto N°68)
Ariel Peña
Comunidad Valdense de San Gustavo-La Paz, Entre Ríos, Argentina.