De traiciones, negaciones y entregas
La propuesta para esta semana es que leamos los capítulos completos del Evangelio según Mateo que hablan de la última semana de Jesús antes de la crucifixión. Esto es Mateo 26:14-27:66. Hay tantas referencias para poder dar un mensaje que he decidido tomarlas todas, si, para que no se pase ninguna por alto.
De traiciones, negaciones y entregas estamos hechos los humanos. No tenemos la perfección esperada en la creación. El círculo íntimo de Jesús es protagonista de estas tres palabras. Si, ellos, los que estaban codo a codo con Él todo el día. No bastaron los momentos de tensión vividos en esa famosa cena. Todos tenían un convencimiento: que eran los mejores. Ese falso espejo que llevamos en nuestras mochilas ¡Somos igual a ellos!
Muchas veces necesitamos recordar no solo una palabra o una acción, sino una serie de acontecimientos para que podamos ver en su total magnitud el momento al que vamos a referirnos. Celebrar la pascua no es solamente cumplir los preceptos que desde chicos nos enseñaron en la iglesia. Es entender que nuestras acciones a lo largo de nuestra vida nos recuerdan a la de los discípulos, que en todas sus adversidades y con la justificada fe que tenían necesitaron pasar por momentos no agradables para poder ver con claridad el camino. Fueron leales y combativos con un líder a su lado. Pero al encontrarse solos fueron indefensos como un niño. Nada mas parecido a nuestra humana realidad. No debemos confiarnos en que estamos seguros bajo la luz del evangelio, siempre tenemos un momento para tropezar o caer. Aunque no lo pensemos hoy, nuestro peor enemigo podemos ser nosotros mismos. Si bien no tenemos la verdad absoluta, seguimos buscando el camino. En estos tiempos de quedarnos en casa para cuidarnos y cuidar al otro/otra no dejemos de orar y aferrarnos a nuestra fe para no caernos.
Estamos recibiendo constantemente mensajes de ayuda y esperanza por nuestras redes sociales. Tal vez es el momento de conocer una nueva forma de comunicar el Evangelio, de sentirnos comunidad. De saber que fuera de esas cuatro paredes también está Dios. Leamos la Biblia y compartamos nuestros sentimientos, lo que nos pasa, lindo o feo, pero no nos quedemos, porque si hay algo que nos reconforta es que tras los sucesos que recordamos al principio, está la esperanza que nos da el resto del relato, pero como ya sabemos, eso es tema del próximo domingo.
Brian Tron
Comunidad de Colonia Belgrano, Santa Fe, Argentina.