
Nelly Hauswirth, oriunda de Reconquista, nos cuenta sobre la presentación de su libro, titulado «Nosotros, la gente por los caminos del Chaco», escrito a partir de sus experiencias en la Junta Unida de Misiones (JUM) en Juan José Castelli, Chaco.
Participé en los sínodos en los años ’80, después me fui del país, así que mis caminos fueron un poco aparte de la Iglesia Valdense; y ahora estoy de regreso, vivo en Reconquista y trabajo otra vez en la JUM.
Trabajé en la JUM como Trabajadora Social, y ahora escribí un libro con relatos de vivencias, tanto de mi trabajo en la JUM como en los organismos estatales. El libro tiene un relato que se refiere propiamente a ese trabajo en JUM, y, en otros relatos, la JUM aparece un poco tangencialmente; también hay relatos con gente criolla y con descendientes de los inmigrantes que tiene Chaco, que vinieron de Bulgaria, de Rusia, de Ucrania, de Polonia, de varios países. Este libro que está escrito con el corazón para no olvidar esas vivencias, para no olvidar todo ese tiempo de aventura, y un poco el sentido de querer escribirlo y presentarlo acá en el Sínodo es porque lo recaudado va a las residencias estudiantiles que tiene JUM.

La JUM tiene dos edificios, uno para mujeres y otro para varones, son estudiantes QOM y Wichí, que están viviendo en Castelli; ellos vienen de lugares rurales muy apartados, así que es la única posibilidad que tienen para seguir estudiando, porque vienen de familias muy modestas. El sustento diario de ellos sale de la JUM, lo están manejando con donaciones espontáneas y particulares, no hay un proyecto que esté cubriendo esos gastos, esa inversión, no es un gasto, es una inversión, pero yo creo que sí, que hay que invertir en esas vidas jóvenes que le van a hacer mucho bien a la comunidad originaria.
