¿Qué es lo que tiene la vida que hay que vigilarla hasta la muerte?
Nos cuenta el evangelio que, entre los sacerdotes, los fariseos y Pilato, pusieron guardias armados a custodiar la tumba de Jesús. (Mt. 27.66) y que luego de la resurrección, sobornaron a los soldados para que contaran que los discípulos habían robado el cuerpo (Mt. 28.13) ¿Tanto miedo genera la vida que hay que vigilarla hasta la muerte? ¿O es quizás que en algún rincón de la conciencia el bichito de la duda hace su trabajo y taladra las seguridades, y apolilla las piedras del pensamiento? O es, como dice el poeta, que “la justicia tarda y nunca llega, pero es la pesadilla del culpable1”.
Lo cierto es que la historia se repite. En nuestros países de la región, miles de torturados, asesinados y desaparecidos por las dictaduras, siguen custodiados, guardados en las tumbas vivientes que son las memorias de sus asesinos, en las mentiras oficiales y las verdades jamás contadas. ¿Porqué seguir ocultando donde están los desaparecidos? Por la misma razón que pusieron soldados en la tumba de Jesús y negaron la resurrección diciendo que habían robado el cuerpo, porque la verdad es insoportable para el malvado y aunque sea mera ilusión, se aferra a la mentira y al ocultamiento con la vana pretensión de que sea sólo esa la noticia que perdura: robaron el cuerpo de Jesús, los desaparecidos no existen, todo es pura imaginación.
Pero la verdad, triunfa siempre, abriéndose paso entre las ruinas de la miseria humana, rompiendo las cadenas del silencio y la mentira, floreciendo en pensamientos libres y libertarios, que no se cansan de buscar ni de decir al mundo entero que Jesús resucitó, que inútil es todo intento por detener la vida, de vigilar la vida, de detener el brote de las conciencias, porque hay resurrección, porque Jesús vive otra vez, y en él y con él vive la memoria, aquella que no renuncia ni claudica, sino que aguarda con esperanza el tiempo de la justicia.
Pastor Marcelo Nicolau, secretario Mesa Valdense.
1Cardozo, Tabaré. El tiempo me enseñó.
Cuanta verdad!! Cuanta eaperanza me da esta meditacion! Gracias!!