CAPACITACIÓN EN COMUNICACIONES – PRESBITERIO SUR ARGENTINO
El sábado 31 de julio de 2021 a las 17 horas, con la participación de 16 hermanos/as de las comunidades de Flores, Laprida, Bahía Blanca y Colonia Iris, respectivamente, se desarrolló vía zoom una capacitación en el marco de la segunda asamblea del PSA. Dicha capacitación, solicitada por las comunidades del PSA estuvo a cargo de Verónica Biech, quien está a cargo de la Secretaría de Comunicaciones de la IEVRLP.
Se dio comienzo con un devocional a cargo de los pastores Alfredo Servetti y Álvaro Michelín Salomón y de Yanina Vigna, presidenta de la comisión presbiterial PSA. El mismo estuvo basado en los primeros versículos de los cuatro evangelios. Mateo 1:1-6; Marcos 1:1-4; Lucas 1:1-4 y Juan 1:1-5; que plasman la necesidad de anunciar, de comunicar; aunque ponen distintos énfasis. Y van dirigidos a comunidades, personas, caminos, formas de ser comunidad. Cada evangelio hace hincapié en la comunicación; pero con distintos enfoques: Mateo en el sentido de la memoria, en el linaje; Marcos en la fuerte presencia de las comunidades rurales, las fronteras, las migraciones; Lucas hace más explícita la comunicación y el mensaje que se quiere compartir con personas más marginadas y especialmente con mujeres. Es crítico con quienes se enriquecen. Y Juan se diferencia de los otros. Muestra a un Jesús más teólogo, capaz de tener discusiones profundas con un teólogo judío, pero también de encontrarse con una mujer en un pozo. Jesús tiene el rango de Dios, pero también el humano: puede curar, sanar, reanimar y puede hacer el lavado de pies, humilde y comprometido con la humanidad. Luego de la reflexión, finalizan con una bendición.
Verónica da comienzo a la capacitación presentándose. Y propone formar dos grupos para responder a dos preguntas:
1) ¿De qué hablamos cuando hablamos de comunicación?
2) ¿Existen diferencias cuando hablamos de comunicación en la iglesia?
Respuesta del grupo 1: Acción, escucha, interacción, respeto, diálogo, intercambio, pausa, silencia, códigos, gestos, manifestaciones corporales, herramienta para compartir ideas.
Respuesta del grupo 2: Lo distintivo es que es la expresión de un colectivo, es el mensaje, desde distintas instancias que avalan; no son acciones individuales.
A continuación, Verónica señala que en el acto de comunicar hay tres instancias el Emisor, el Canal y el Receptor. ¿Quién emite el comunicado? Esto marca una diferencia fundamental. ¿Quiénes van a ser los/las receptores/as?
Hay una diferencia básica entre comunicación e información. Comunicare viene del latín y significa “Poner en común”. Ello propicia la construcción de relaciones, facilita los procesos de diálogo y permite reconocer al otro/a en nuestros proyectos; es decir, cuando la otra/o participa activamente de la acción comunicativa. Lo que implica acercarnos al otro/a para conocer y comprender el mundo de aquellos/as con quienes queremos relacionarnos y emprender iniciativas para el bien común.
Y bien… ¿Para qué nos sirve aprender a comunicarnos? Para contar con espacios en los que podamos dar a conocer nuestras ideas; para integrarnos y relacionarnos, para incidir en los comportamientos reforzando y cuestionando, para mejorar las relaciones. Entonces… ¿Por qué fallamos? Por el mapa mental de cada uno/a. Es decir, porque cada una/o nos formamos representaciones o mapas de la realidad. Percibimos la realidad del otro/a desde nuestras propias vivencias, a través de los sentidos que están afectados neurológica y psicológicamente. Por lo tanto, debemos tratar de comunicarnos de tal o cual manera para llegar al otro/a.
La NO RESPUESTA, también es respuesta. Pero claramente implica la inflexibilidad del comunicador. Entonces, ¿cómo obtener del receptor la respuesta que queremos? Buscando formas de transmitir el mensaje. Hay retroalimentación. Como emisor vas a llegar hasta un punto y vas a darte cuenta si la otra persona está abierta a la comunicación. Muchas veces hay una negativa a recibir ciertos mensajes.
Aborda a continuación la COMUNICACIÓN INSTITUCIONAL. “La comunicación crea comunidad”. La comunicación auténtica es abierta e inclusiva. Es un derecho y es fundamental para organizar las tareas. Para comunicar desde la institución es necesario tener claro la VISIÓN y la MISIÓN de la iglesia (en este caso). Antes hay que decidir conjuntamente qué se tiene que decir. Según la expresión de Jesús Martín Barbero, es incomodarnos, cuestionarnos la realidad. Sumar voces y vivencias; desafiándonos.
Comunicar a todos/as trasciende la comunicación institucional. En una empresa es más sencillo, hacés una bajada y está. En cambio, en la iglesia, contamos con las asambleas; que son un marco que avala y ayuda.
La comunicación institucional debe llevarnos a construir comunidades de confianza o hacer de nuestras comunidades espacios donde la gente sea reconocida y valorada. Debemos recuperar las afectividades; cultivar lazos de solidaridad, hacer del encuentro humano una experiencia.
Tener un mapa de identidad, un mapa de ideas. Reconocer el potencial que tenemos, las capacidades con las que contamos y nuestra propia competencia comunicacional.
Verónica propone trabajar el Mapa de Identidad en las comunidades. Reflexionar acerca de: ¿Quiénes somos? ¿Qué caracteriza nuestra identidad? ¿Cuáles son nuestras fortalezas institucionales?
Con estos insumos se dará continuidad a la capacitación en fecha a confirmar.
Se da por finalizada esta instancia después de más de dos horas de trabajo y participación activa de los/as participantes. Resultó muy enriquecedora esta capacitación y nos dejó a todos/as con ganas de continuar capacitándonos en esta temática tan importante como necesaria para generar una red humana de solidaridad.
Lilian Rostán