Mensaje de la Mesa Valdense ante la situación pre electoral del pueblo argentino

Paysandú, 11 de octubre de 2023


CARTA PASTORAL MV ANTE SITUACIÓN EN ARGENTINA


Amados/as hermanos/as, iglesias valdenses en Argentina, iglesias hermanas, querido pueblo argentino, es frecuente que los tiempos electorales traigan consigo acentuación de conflictividad social, que se suma a los problemas económicos que por cierto no son nuevos y que afligen a nuestro pueblo. En ese contexto de mucha sensibilidad y efervescencia social, aparecen manifestaciones y propuestas de todo tipo, que en muchos casos, lejos de atenuar los sentimientos de bronca y frustración para canalizarlos constructivamente, los exacerban en posturas destructivas y peligrosas para una buena convivencia democrática.

No debemos olvidar que la competencia electoral y las candidaturas correspondientes a esa instancia no deben ser más que un servicio de las personas a la sociedad toda, que debe elegir a sus representantes.

¿Qué aporte podemos hacer las iglesias desde nuestra fe? Con humildad y sencillez, desde la Mesa Valdense queremos compartirles algunos pensamientos en la esperanza que ayuden a reflexionar y actuar. ¿En base a qué? La Palabra de Dios es lo que nos debe guiar siempre, por eso, recordamos y compartimos con ustedes que:
En un clima de violencia y confrontación el evangelio nos llama a ser agentes de paz
(“Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque Dios los llamará hijos suyos” Mateo 5:9).


En un contexto donde abundan agresiones verbales, recordar que la Palabra nos invita a ser cuidadosos con la palabra y el pensamiento. (“Aparta de ti la perversidad de la boca, y aleja de ti la iniquidad de los labios”. Proverbios 4:24).


En un tiempo donde se cuestiona la justicia social y se pone en duda los derechos humanos, reafirmar que la Palabra nos llama a la conciencia y a la acción social recordando siempre a los más débiles y necesitados. (“Así ha dicho el Señor: Haced juicio y justicia, y librad al oprimido de mano del opresor, y no engañéis ni robéis al extranjero, ni al huérfano ni a la viuda, ni derraméis sangre inocente en este lugar”. Jeremías 22:3).


En un momento en que se manipula la historia y se reivindican atrocidades, recordar que
Dios todo lo sabe y no dejará impune la iniquidad humana. (“¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!”. Isaías 5:20).


En una época donde se trata todo tema con liviandad y superficialidad banal, recordar que Jesús nos llama a ser conscientes y analizar en profundidad cada cosa, sin actuar con precipitación. (“He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas”. Mateo 10:16)

En una era en la que abundan los enojos y las reacciones intempestivas, recordar que Dios nos ilumina cuando cultivamos la paciencia y el autocontrol. (Mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para enojarse; porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios. Santiago 1:19,20)En una sociedad donde tristemente abunda el maltrato y la violencia, recordar que Dios nos enseña un camino diferente para construir una vida nueva. (“todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas” nos dice Jesús en Mateo 7:12 y “un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis los unos a los otros”. Juan 13:34)

En un mundo lleno de individualismo y olvido por la suerte de los demás, Dios nos llama a vivir una vida en comunidad solidaria, en la esperanza viva del evangelio. (“Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo”. Gálatas 6:2).


En fin, amados/as hermanos/as, es sin dudas, un tiempo de pruebas y desafíos, y más que nunca debemos sostenernos mutuamente, ayudarnos a buscar claridad y sensatez. Como comunidades de Fe que ponen su mirada y su esperanza sólo en Cristo, tenemos el hermoso llamado de Dios a dar testimonio en palabras y hechos en este mundo y particularmente a la sociedad en la que Él nos puso como sus testigos. Oremos como nos enseña la Palabra por quienes nos gobiernan, pero también por quienes ponen sus vidas al servicio de la vida institucional de nuestra sociedad democrática y sobre todo por quienes trabajan y luchan por una vida mejor para su prójimo en todos los órdenes de la vida, siguiendo el ejemplo de Jesús.


Marcelo Nicolau
Moderador MV

Marta Garnier
Vice-moderadora

Daniel Geymonat
Tesorero

Dario Barolin
Secretario

Brian Tron
Consejero

Publicado en Noticias.