QUIÉN ES MI PRÓJIMO

Lee en tu Biblia: Lucas 10:25-37

Hoy Jesús nos vuelve a contar la parábola del Buen Samaritano…

… La oímos, ¿qué novedad nos ofrece?

Mientras escribo estas líneas, hago un repaso por los temas noticiosos de actualidad: El presidente norteamericano, Donald Trump, amenaza con bombardear Irán, mientras levanta un muro en la frontera con México. En este contexto, un profesor, Scott Warren, fue demandado por el gobierno federal por haberle ofrecido agua a los migrantes que se juegan la vida caminando por el desierto de Arizona. También nos enteramos de otra noticia similar: Carola Rackete, capitana del barco “Sea Watch”, fue detenida por el Estado italiano por rescatar 40 migrantes náufragos frente a las costas de Libia. Por otra parte, Israel bombardea territorio sirio: 15 muertos y 21 heridos, entre ellos 3 niños. Mientras tanto, en Argentina, los titulares anuncian que, según un informe de la Universidad Católica Argentina, el 51,7% de los niños y niñas son pobres y, por otra parte, una mujer, Mariana Gómez está detenida por besar a su esposa en la vía pública. Es evidente que estamos viviendo en un fin de época complicado, violento y discriminatorio, entre otras cosas.

La discusión entre Jesús y el maestro de la ley era: ¿Quién es mi prójimo? ¿El que es de mi familia, mi misma sangre, mi compatriota, o el/la que es distinto/a, el/la extranjero/a, el otro, la otra? El protagonista de esta parábola, el samaritano solidario, fue capaz de actuar con amor, derrumbando muros de discriminación y desprecio, en pos de valorar la vida del herido.

Y para nosotros/as: ¿Quién es nuestro prójimo?

El evangelio nos desafía a vivir a corazón abierto, siendo capaces de ser sensibles al dolor ajeno, para poder realizar acciones que derrumben fronteras discriminatorias, excluyentes, violentas y homicidas, levantando en alto las palabras de Jesús cuando despidió al maestro de la ley: “ve y haz tú lo mismo”.

Pastor Eduardo Obregón

Publicado en Reflexiones - Pan de Vida.

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